El presidente de la Asociación de Jóvenes Empresarios (Anje) dijo ayer que es necesario determinar con exactitud cuáles fueron los sectores de la economía que generaron los 130,440 empleos creados en los últimos meses, como informó el martes pasado el Banco Central.
Miguel Roig valoró la noticia de que las plazas de trabajo crecieron, pero dijo que es preciso un análisis más a fondo porque por ejemplo el sector manufactura perdió más de 85 mil empleos el año pasado, aunque este año de acuerdo al reporte aumentó 15 mil.
“No tenemos razón para dudar sobre los datos del informe pero no sabemos de dónde provienen esos empleos o los sectores específicos que lo generaron”, declaró.
El presidente de la ANJE cosideró preocupante el índice de informalidad que existe en los empleos, “una tendencia que sigue en aumento”, según explicó.
Roig enfatizó que la idea no es suprimir esos empleos sino organizarlos para que puedan aportar ingresos al fisco y las personas puedan cotizar en la Seguridad Socia.
Roig ofreció sus declaraciones luego de que se iniciara una conferencia en la Torre Empresarial sobre análisis prospectivos y su aplicación en los negocios.
Reacciones
En torno a la noticia, el empresariado ha presentado posturas similares a la de Roig, que claman por la presición de lo datos. Pedro Pérez, presidente de la Organización de Empresas Comerciales (ONEC), dijo que el incremento en la oferta de empleos se corresponde con el crecimiento que reportan Aduanas y la Dirección de Impuestos, pero citó que puede además ser fruto de un primer semestre electoral.
“No debemos perder de vista que en los años electorales el primer semestre suele crecer a un ritmo más acelerado que durante el segundo semestre”, estimó.
Desde la Asociación de Industrias (AIRD), Cirse Almanzar, su vicepresidenta ejecutiva, valoró consideró preocupante la lenta recuperación del empleo en el sector manufacturero local.
Para la ejecutiva, el alto índice de informalidad incide en la competencia desleal, afecta las inversiones y el fisco.
Ignacio Méndez, presidente de la Federación de Asociaciones Industriales (FAI) coincidió en que los datos deben ser explorados con más cautela y que el aumento de la informalidad resulta preocupante y afecta la economía.