El gobierno de Venezuela exige para importar pollos y huevos dominicanos la misma certificación de sanidad que pide Haití como condición para levantar el impedimento de importación que aplica desde el pasado seis de enero. Esto quiere decir que las gestiones que hacen las secretarías de Relaciones Exteriores y de Agricultura para que Venezuela acepte huevos y pollos como parte del pago de la factura petrolera en el marco de PetroCaribe, no se puede hacer de inmediato.
Para eso se requiere una certificación de la Organización Internacional de Sanidad Animal, donde se dé constancia de que ya el país está libre de la influenza aviar, precisamente la misma certificación que exige Haití.
Entonces, en caso de que el país logre esa certificación, no tendría la necesidad de exportar pollos y huevos hacia Venezuela, pues se levantará el impedimento haitiano y es más fácil venderle a ese mercado, porque está más cerca y tiene menos exigencias de calidad.
Otro elemento en contra que tiene el proceso de exportación de pollos y huevos hacia Venezuela, es que se trataría de una operación de gobierno a gobierno. Esto quiere decir que el Gobierno dominicano tiene que comprarle los huevos y pollos a los productores a precios que le garanticen rentabilidad, y exportarlos con la valoración que Venezuela proponga, la cual puede estar por debajo del precio a que se le compró a los avicultores, con lo cual el Estado tendría que pagar la diferencia.
Esa diferencia a ser pagada por el Estado puede ser la totalidad del valor exportado, toda vez que el combustible que República Dominicana le compra a Venezuela es financiado en un 40%, lo cual quiere decir que no se paga de contado. Si el intercambio de pollos y huevos se hace con base en un trueque como pago de parte de la proporción financiada, entonces el Estado dominicano estaría pagando de inmediato a los productores, lo que debería recibir como financiamiento a través del PetroCaribe.
Nunca se ha hechoCuando se firmó el acuerdo petrolero de PetroCaribe se estableció la posibilidad de pagar parte de la factura petrolera con bienes alimenticios de origen agropecuario a ser exportados a ese país.
La aplicación del acuerdo data del año 2005, pero desde esa fecha hasta ahora no se ha hecho la primera exportación de ningún tipo de alimento producido aquí para exportarlo hacia el mercado de esa negociación.
Eso quiere decir que aparentemente el procedimiento para hacer un trueque de alimentos dominicanos por combustible venezolano no es tan fácil como ahora lo han presentado a los medios de comunicación para crear una especie de esperanza a los productores de pollos y huevos.
Para eso se requiere una certificación de la Organización Internacional de Sanidad Animal, donde se dé constancia de que ya el país está libre de la influenza aviar, precisamente la misma certificación que exige Haití.
Entonces, en caso de que el país logre esa certificación, no tendría la necesidad de exportar pollos y huevos hacia Venezuela, pues se levantará el impedimento haitiano y es más fácil venderle a ese mercado, porque está más cerca y tiene menos exigencias de calidad.
Otro elemento en contra que tiene el proceso de exportación de pollos y huevos hacia Venezuela, es que se trataría de una operación de gobierno a gobierno. Esto quiere decir que el Gobierno dominicano tiene que comprarle los huevos y pollos a los productores a precios que le garanticen rentabilidad, y exportarlos con la valoración que Venezuela proponga, la cual puede estar por debajo del precio a que se le compró a los avicultores, con lo cual el Estado tendría que pagar la diferencia.
Esa diferencia a ser pagada por el Estado puede ser la totalidad del valor exportado, toda vez que el combustible que República Dominicana le compra a Venezuela es financiado en un 40%, lo cual quiere decir que no se paga de contado. Si el intercambio de pollos y huevos se hace con base en un trueque como pago de parte de la proporción financiada, entonces el Estado dominicano estaría pagando de inmediato a los productores, lo que debería recibir como financiamiento a través del PetroCaribe.
Nunca se ha hechoCuando se firmó el acuerdo petrolero de PetroCaribe se estableció la posibilidad de pagar parte de la factura petrolera con bienes alimenticios de origen agropecuario a ser exportados a ese país.
La aplicación del acuerdo data del año 2005, pero desde esa fecha hasta ahora no se ha hecho la primera exportación de ningún tipo de alimento producido aquí para exportarlo hacia el mercado de esa negociación.
Eso quiere decir que aparentemente el procedimiento para hacer un trueque de alimentos dominicanos por combustible venezolano no es tan fácil como ahora lo han presentado a los medios de comunicación para crear una especie de esperanza a los productores de pollos y huevos.