El hecho se produjo a una esquina del Palacio de la Policía Nacional, donde los conductores que pasaban por el lugar en su desesperación por avanzar sólo atinaban a vociferar “paren ese loco”, por lo que los agentes se vieron en la obligación de devolverle nuevamente su aparato.
Jhonny Miguel Rodríguez Jiménez, quien se desempeña como motoconchista, entre llanto decía que se tiró en el pavimento en protesta porque los agentes de la Amet le habían quitado su motor y que hasta que no se lo devolvieran no desistía de la acción.
Relató que tenía otro motor y que se lo robaron en un atraco y que ese tuvo que sacarlo fiao para poder seguir conchando, que es su sustento de vida.
“Yo soy un hombre de trabajo, por qué me hacen eso a mí, aquí yo preso por un motor y Sobeida gozando en una villa”, decía.
Ante la acción un oficial de la Amet le dijo que le devolverían su motor si se calmaba.
Mientras que su esposa Miguelina Pérez, quien le acompañaba, le decía que se parara que eso se iba a solucionar, mientras las bocinas no paraban de sonar.