BIARRITZ, Francia.- El presidente Leonel Fernández advirtió aquí que si persiste la falta de confianza y de control en el sistema financiero mundial se podría estar incubando una nueva crisis o la prolongación de la actual.
Al pronunciar el discurso en la apertura del IX Foro de Biarritz, el Gobernante dominicano dijo que la causa que contribuyó a fomentar el alza de los precios del petróleo y de los alimentos es la misma que motivó a impulsar la crisis hipotecaria, financiera y económica que actualmente se esparce por el planeta.
Refirió que la desregulación financiera tiene una incidencia directa y determinante en la estabilidad de las naciones y la prosperidad de los pueblos.
Planteó que para evitar la repetición de futuras alzas de precios en los productos básicos comercializados en los mercados internacionales es preciso elaborar una nueva legislación que prohíba la utilización de activos financieros en la contratación de compra y venta de productos a futuro, o que establezca un margen a las primas que se pagan por la suscripción de dichos contratos.
“Por demás, en lo que se refiere al sistema financiero es más que evidente la necesidad de diseñar y poner en ejecución un nuevo orden financiero global, post Bretton Woods, que sea más justo, más equitativo, más incluyente y más solidario”, refirió.
El nuevo orden financiero global por el que abogó, según dijo, tiene que ser elaborado como señalara el presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas, el nicaragüense Miguel D’Escotto Brocman, no por el G-7, ni el G-9, ni el G-20, sino por el G-192, que comprende a todas las naciones, ricas y pobres, que comparten un mismo destino sobre la faz de la tierra.
En su discurso, el presidente Fernández propuso que ese nuevo orden financiero global lleve el nombre de los acuerdos de Biarritz, pues aquí se encontrará la calma, la paz y la tranquilidad de espíritu que se requiere para convertir esta época de cambios en un verdadero cambio de época.