CAMAGUEY, Cuba.- El mortífero huracán Ike rugía el lunes sobre Cuba, convirtiendo edificios en escombros y enviando olas por encima de los edificios de apartamentos. Unos 900.000 cubanos evacuaron la zona afectada, mientras los meteorólogos indicaban que podría dirigirse hacia La Habana en las próximas horas, y a Luisiana o Texas en los próximos días.
Ike, que golpeó a las Bahamas y empeoró inundaciones en Haití que ya han matado a 321 personas, tocó tierra en Cuba como un temible huracán de categoría 3, antes de que a su paso por Cuba el lunes bajara a la aún peligrosa categoría 2.
Mientras tanto, la orden de evacuación emitida en la mañana del lunes para los Cayos del estado de Florida, en el sureste de Estados Unidos, fue suspendida, luego que Ike tornase rumbo más hacia el sur.
Los meteorólogos dijeron que la tormenta pudiera tocar tierra el fin de semana cerca de la frontera entre Luisiana y Texas, probablemente no lejos de Houston.
Para finales de la mañana, Ike tenía vientos máximos sostenidos de 160 kilómetros por hora (100 millas por hora) y estaba unos 75 kilómetros (45 millas) al oeste-suroeste de Camagüey, dijo el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos.
Según los especialistas, Ike podría seguir perdiendo fuerza el lunes mientras avanza por el centro de Cuba debido al contacto con tierra firme.
Se piensa que saldrá de nuevo al mar en algún lugar cercano a La Habana en las próximas horas, posiblemente el martes.
Los vientos en Camagüey comenzaron a golpear el domingo por la noche. "Casi no dormimos anoche, fue sólo 'bum bum bum'. Como éste nunca he vista en mi vida tanta fuerza. Le asusta a uno", dijo a AP la residente Olga Alvarez.
La categoría 2 lo ubica abajo de la mitad de la escala internacional de cinco niveles. Con categoría 3 arrasó casas y derribó árboles en el Caribe.
Al menos 900.000 personas fueron desalojadas en Cuba y llevadas a refugios o tierras altas ante la presencia de Ike, que antes golpeó a las Bahamas y agravó en Haití las inundaciones que cuatro meteoros han causado en un mes 321 muertes.
En declaraciones a la televisión estatal, el vicepresidente cubano Carlos Lage dijo que la isla se preparaba para un fuerte golpe.
Varias provincias cubanas entraron en alerta de huracán por Ike, dijeron las autoridades cubanas que lo calificaron de "poderoso" y "peligroso".
Desde la localidad de Baracoa, donde se hicieron sentir los primeros vientos, se reportaron olas de siete metros de alto y las aguas entraron hasta seis cuadras al interior de la pequeña ciudad del oriente de Cuba. La televisión mostró imágenes dramáticas del Malecón de esa ciudad oriental.
En Jaimanitas, un barrio en la costa norte de Ciudad de La Habana, Yusenia Aguilar vive en una casa de la zona baja, acompañada de dos hijos, de siete y cinco años.
"Mi casa es fuerte y no se va a caer, no le tengo miedo al viento pero sí al agua que sube mucho en esta zona", explicó Aguilar a la AP.
Gisel Corva, también de Jaimanitas, exclamó: "Yo le tengo tremendo miedo al ciclón pero no me evacuo porque mi casa es segura y no vivo en zona baja, pero sí, a veces viene gente a albergarse a mi casa, vecinos o familia, porque ahí están a salvo".
Aguilar y Corva afirmaron que en la bodega del lugar ya se había entregado leche para los niños y pan, así como algunos otros productos, como arroz y frijoles. Un puesto de venta de viandas, frutas y hortalizas estaba abierto. Corva por ejemplo compró plátanos "porque es lo que mejor se conserva si quitan la luz y alimenta".
Gregorio Isidoro, en el barrio de Playa, dijo que observaba una "montaña de escombros" que están allí desde el paso de Gustav hace una semana. "Nadie lo ha recogido a pesar de que dicen en radio y televisión que la ciudad está lista para enfrentar el ciclón Ike", agregó.
En el sureste de Estados Unidos, Ike ha frenado los trabajos para normalizar la producción de crudo y gas en el Golfo de México, afectada por el anterior huracán, Gustav.
Ike azotó primero las islas Turcos y Caicos, donde dañó el 80% de la viviendas del archipiélago dejó centenares de damnificados, dijo el primer ministro Michael Misick.
En República Dominicana, un agricultor murió aplastado por un árbol derribado por las lluvias y los vientos que generó Ike. El Centro de Operaciones de Emergencias de Dominicana informó que el ciclón dejó 11.915 personas desplazadas, dos puentes caídos y cinco carreteras bloqueadas.
Mientras, la tormenta tropical Lowell se movía en forma paralela a la costa de México en el Pacífico con vientos sostenidos de 96 kph (60 mph). Pero el Centro Nacional de Huracanes predijo que podría virar hacia la península de Baja California en el noroeste mexicano al final de la semana.
Ike, que golpeó a las Bahamas y empeoró inundaciones en Haití que ya han matado a 321 personas, tocó tierra en Cuba como un temible huracán de categoría 3, antes de que a su paso por Cuba el lunes bajara a la aún peligrosa categoría 2.
Mientras tanto, la orden de evacuación emitida en la mañana del lunes para los Cayos del estado de Florida, en el sureste de Estados Unidos, fue suspendida, luego que Ike tornase rumbo más hacia el sur.
Los meteorólogos dijeron que la tormenta pudiera tocar tierra el fin de semana cerca de la frontera entre Luisiana y Texas, probablemente no lejos de Houston.
Para finales de la mañana, Ike tenía vientos máximos sostenidos de 160 kilómetros por hora (100 millas por hora) y estaba unos 75 kilómetros (45 millas) al oeste-suroeste de Camagüey, dijo el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos.
Según los especialistas, Ike podría seguir perdiendo fuerza el lunes mientras avanza por el centro de Cuba debido al contacto con tierra firme.
Se piensa que saldrá de nuevo al mar en algún lugar cercano a La Habana en las próximas horas, posiblemente el martes.
Los vientos en Camagüey comenzaron a golpear el domingo por la noche. "Casi no dormimos anoche, fue sólo 'bum bum bum'. Como éste nunca he vista en mi vida tanta fuerza. Le asusta a uno", dijo a AP la residente Olga Alvarez.
La categoría 2 lo ubica abajo de la mitad de la escala internacional de cinco niveles. Con categoría 3 arrasó casas y derribó árboles en el Caribe.
Al menos 900.000 personas fueron desalojadas en Cuba y llevadas a refugios o tierras altas ante la presencia de Ike, que antes golpeó a las Bahamas y agravó en Haití las inundaciones que cuatro meteoros han causado en un mes 321 muertes.
En declaraciones a la televisión estatal, el vicepresidente cubano Carlos Lage dijo que la isla se preparaba para un fuerte golpe.
Varias provincias cubanas entraron en alerta de huracán por Ike, dijeron las autoridades cubanas que lo calificaron de "poderoso" y "peligroso".
Desde la localidad de Baracoa, donde se hicieron sentir los primeros vientos, se reportaron olas de siete metros de alto y las aguas entraron hasta seis cuadras al interior de la pequeña ciudad del oriente de Cuba. La televisión mostró imágenes dramáticas del Malecón de esa ciudad oriental.
En Jaimanitas, un barrio en la costa norte de Ciudad de La Habana, Yusenia Aguilar vive en una casa de la zona baja, acompañada de dos hijos, de siete y cinco años.
"Mi casa es fuerte y no se va a caer, no le tengo miedo al viento pero sí al agua que sube mucho en esta zona", explicó Aguilar a la AP.
Gisel Corva, también de Jaimanitas, exclamó: "Yo le tengo tremendo miedo al ciclón pero no me evacuo porque mi casa es segura y no vivo en zona baja, pero sí, a veces viene gente a albergarse a mi casa, vecinos o familia, porque ahí están a salvo".
Aguilar y Corva afirmaron que en la bodega del lugar ya se había entregado leche para los niños y pan, así como algunos otros productos, como arroz y frijoles. Un puesto de venta de viandas, frutas y hortalizas estaba abierto. Corva por ejemplo compró plátanos "porque es lo que mejor se conserva si quitan la luz y alimenta".
Gregorio Isidoro, en el barrio de Playa, dijo que observaba una "montaña de escombros" que están allí desde el paso de Gustav hace una semana. "Nadie lo ha recogido a pesar de que dicen en radio y televisión que la ciudad está lista para enfrentar el ciclón Ike", agregó.
En el sureste de Estados Unidos, Ike ha frenado los trabajos para normalizar la producción de crudo y gas en el Golfo de México, afectada por el anterior huracán, Gustav.
Ike azotó primero las islas Turcos y Caicos, donde dañó el 80% de la viviendas del archipiélago dejó centenares de damnificados, dijo el primer ministro Michael Misick.
En República Dominicana, un agricultor murió aplastado por un árbol derribado por las lluvias y los vientos que generó Ike. El Centro de Operaciones de Emergencias de Dominicana informó que el ciclón dejó 11.915 personas desplazadas, dos puentes caídos y cinco carreteras bloqueadas.
Mientras, la tormenta tropical Lowell se movía en forma paralela a la costa de México en el Pacífico con vientos sostenidos de 96 kph (60 mph). Pero el Centro Nacional de Huracanes predijo que podría virar hacia la península de Baja California en el noroeste mexicano al final de la semana.