MADRID.- El presidente de la República Dominicana, Leonel Fernández, pidió hoy en España que Haití sea incorporado a la Comunidad Iberoamericana y señaló como el gran desafío para su país y toda América Latina entrar "en el capitalismo moderno global, aprovechar sus oportunidades".
Fernández, acompañado por su esposa, realiza una visita oficial a España, en la que hoy es recibido por los reyes Juan Carlos y Sofía.
En su intervención en el foro Tribuna Iberoamericana, que organizan la Casa de América y la Agencia EFE, el presidente dominicano reclamó que su vecina Haití sea incorporada a la Comunidad Iberoamericana, "como un acto de reparación histórica".
Con motivo de los bicentenarios de la independencia, Fernández trazó el recorrido que América Latina ha hecho desde entones para culminar en el siglo XX su propia transición "de regímenes autoritarios" hasta la calidad democrática actual.
Existe ahora un "criterio generalizado en América Latina de que la política debe someterse al estado de derecho", afirmó, para destacar que en la región "no está en peligro la existencia de un sistema democrático".
El problema fundamental, dijo, es de carácter económico y social, "la pobreza y la desigualdad social, que solo se puede resolver cuando se tiene un sistema económico próspero.
Sostuvo que el "populismo jugó su papel histórico pero llegó a su agotamiento", y aunque la economía de mercado "corrigió" algunos de sus excesos, es "más apropiado un balance", sin que desaparezca el papel "imprescindible para corregir" del Estado.
Para Fernández el desafío es "cómo se integra la cadena nacional del valor", invertir en "formación de capital humano" con la incorporación de las nuevas tecnologías y con "una estrategia nacional de integración en los mercados internacionales".
Recordó que el 70 por ciento del comercio de su país es con Estados Unidos, y dijo que hay que buscar también vías de diversificación con vínculos con España, Europa y Asia.
Afirmó que su visita a España "no es para pedir" sino para "compartir", y destacó sectores de mutuo interés como la energía -eólica, solar- o el de las telecomunicaciones.
Sobre las repercusiones de la crisis económica mundial en su país, dijo que el Plan Nacional de Competitividad sigue siendo válido.
La República Dominicana pasó de crecer a una tasa anual de promedio de 8,5% "a que de repente nos sentimos felices porque en el primer trimestre crecimos un 1 por ciento".
Sin embargo, dijo Fernández, "la proyección es que podamos crecer en el 2009 un 4 por ciento".
En turismo, "nuestras previsiones se han mantenido, es posible que haya habido una cierta desaceleración con respecto a las expectativas, pero el flujo se ha mantenido".
Como consecuencia de la gripe A, Fernández afirmó que "lamentamos mucho la situación para México, pero República Dominicana ha recibido de alguna manera los turistas que iban a México y han sido desviados una parte de ellos".
"Aquí se da lo de que la desgracia de uno es la suerte de otro. Obviamente, no es lo que deseamos. Nos gustaría un mundo más estable y beneficioso para todos", agregó.
Sobre la inmigración, con un gran número de emigrantes en EEUU y en países como España, Fernández dijo que "lo importante es mas mantener el vínculo, el sentido de la dominicanidad, el flujo de ir y venir".
En la reforma de la Constitución se prevé que los emigrantes cuenten con representantes en el Parlamento, y en el caso de España tendrían dos diputados, uno por Madrid y otro por Barcelona, señaló.
Las remesas que envían suponen 3.500 millones de dólares anuales, algo más del 12 ó 13 por ciento del PIB de República Dominicana, de la que la mayor parte procede de Estados Unidos.
España, que ocupa el segundo lugar en esos envíos, representaría entre el 3 y el 4 por ciento, agregó Leonel Fernández.