La Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus) sostuvo que el recién pasado proceso electoral dejó varias lecciones para el futuro de la nación, y entre otros aspectos indicó que se debe regularizar la inversión en la propaganda.
Al hacer su valoración de las elecciones, el vicepresidente de la entidad, Servio Tulio Castaños Guzmán, consideró la publicidad de los partidos excesiva y que genera “una verdadera contaminación visual y auditiva”.
Abogó porque las organizaciones de la sociedad civil y la ciudadanía en general contribuyan en la identificación de mecanismos para controlar los gastos de campaña por parte de los partidos, que se elimine el clientelismo, se evite el uso de los recursos del Estado y se mejore el marco legal de las entidades políticas, entre otros aspectos.
Consideró que la Ley Electoral amerita una modificación para que se incluya algún mecanismo de conteo rápido para conocer la voluntad popular, como es el caso de las encuestas a boca de urna que en otros países se utiliza de manera regular, sin crear trastornos ni distorsiones.
La Finjus coincide con Participación Ciudadana, que realizó un conteo rápido de las pasadas elecciones, pero no pudo divulgarlo por la prohibición de la Junta Central Electoral.
Es de importancia para la Finjus, que se regularice y limite el período pre-electoral, en lo que incluye las primarias internas de los partidos, lo mismo que la campaña electoral en sí.
La Finjus se comprometió a colaborar para que la calidad de la democracia y la participación activa de los ciudadanos caractericen el sistema político nacional, lo cual entiende es esencial para el desarrollo económico, social y político del país.
Elogia comportamiento en elecciones
La Finjus destacó que estas elecciones se convierten en un referente para el desarrollo de la cultura electoral en el país. Con relación a la Junta Central Electoral, opina que realizó una organización adecuada de los comicios, y que cumplió su palabra empeñada.
Asimismo, resaltó la participación civilizada de los votantes al acudir a las urnas y que los partidos políticos, aunque en diferentes momentos del proceso dieron muestras de no estar a la altura de las expectativas de los ciudadanos, actuaron de forma adecuada durante las votaciones y las horas que le siguieron.