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jueves, 4 de septiembre de 2008

Más de 60 muertos en Haitípor inundaciones provocadas por la tormenta Hanna

Al menos 61 personas murieron en Haití a causa de las inundaciones provocadas por la tormenta tropical "Hanna", que se desplaza hacia las Bahamas, informaron hoy fuentes oficiales haitianas.
Según la oficina de Protección Civil, 37 personas fallecieron en Artibonite (norte), 21 de ellas en la ciudad de Gonaives, la región más afectada por "Hanna".
Once más murieron en el sur, una en Nippes (sur) y doce en el departamento oeste.
La fuente precisó que aunque estos son los departamentos más golpeados, otras zonas resultaron hoy afectadas por las lluvias que continúan cayendo sobre el territorio haitiano.
Asimismo, calificó de "severo" el daño provocado por la tormenta tropical "Hanna" al sector agrícola y ganadero local, así como a las infraestructuras.
En tanto, la Oficina Nacional de Meteorología anunció que las lluvias continuarán durante toda la noche, por lo que llamó a la población a mantenerse vigilante ante la situación.
Horas antes, la oficina de Protección Civil confirmó que el nivel de las aguas ha bajado un poco en Gonaives, donde las autoridades organizan hoy la distribución de 5.000 raciones de comida.
Sin embargo, la circulación en esta zona es difícil, lo que dificulta las labores de socorro y la región está aislada de la capital, Puerto Príncipe.
El alcalde de Gonaives, Stephen Moise, indicó que gran parte de la ayuda de emergencia está paralizada en la vecina ciudad de Saint-Marcm y que, de momento, es imposible evaluar los daños materiales ocasionados por el fenómeno meteorológico en Gonaives.
La situación es tal que muchas personas están llamado a emisoras de radio para pedir pan, agua y lámparas, mientras continúan en los techos de las casas por segundo día consecutivo debido a las inundaciones.
Una gran cantidad de usuarios se quedaron sin energía eléctrica debido a que los fueros vientos derribaron cables de alta tensión, lo que hizo que las autoridades desconectaran el servicio, según testimonios de emisoras locales.
En Puerto Príncipe, el sol salió brevemente y se realizaron gran parte de las actividades económicas y sociales y en algunos sectores de la capital, trabajadores recogían los arboles derribados por los fuertes vientos, incluso cerca del Palacio Presidencial.
Las autoridades mantienen en toda la mitad norte del país el nivel de alerta roja, el máximo, ante las fuertes lluvias, vientos e inundaciones, mientras que en el resto del territorio el grado de vigilancia es amarillo.
Todos los puertos se mantienen cerrados, al igual que los aeropuertos, a excepción del de la capital, Puerto Príncipe, que fue reabierto.