Explicó que la pobreza dominicana tiene rangos que van desde una situación de sobrevivencia, de personas que se alimentan diariamente, aunque sea una sola vez, hasta niveles de indigencia, donde muchas familias pasan hasta dos y tres días sin probar alimentos.
Resaltó que estos niveles de pobreza extrema se presentan tanto en barrios de la capital, como en los campos del interior del país.
Sin embargo, la profesional descartó que esa situación de pobreza extrema guarde relación directa con el alto índice de delincuencia que afecta al país, resaltando que muchos de los que delinquen no es precisamente para comer.
Responsabilizó del auge de la delincuencia al micrográfico de drogas en los barrios donde según dijo, abunda mayormente la venta de marihuana y crack, esta última por ser mucho más barata pese al alto grado de daño que provoca en las personas.
“Y en último grado la cocaína, pero una cocaína mala, porque la buena en los barrios la venden a personas que no son del barrio sino que van allí a abastecerse”, aseguró al ser entrevistada en el programa “El Bulevar con Pablo Mckinney” que se transmite por CDN2.
Tahira Vargas destacó que en la sociedad dominicana, especialmente en los sectores más pobres hay mucha solidaridad y apoyo con los vendedores de droga, debida a la ayuda que estos brindan a la comunidad.
Recordó que el ejemplo más claro lo representa el ex capitán Quirino Ernesto Paulino Castillo y el impacto que ha tenido en la población de Elías Piña su apresamiento y posterior deportación a Estados Unidos.
“Porque Quirino le estaba dando de comer a mucha gente, porque no solo tenía los negocios, no solo la producción agrícola y de madera, sino también que regalaba dinero, resolvía cuando la gente necesitaba para problemas de salud, de enfermedad, e incluso de reparación de viviendas, o sea, todo lo que tenía que ver con problemas que le tocarían al Estado”, indicó.
Resaltó que estos niveles de pobreza extrema se presentan tanto en barrios de la capital, como en los campos del interior del país.
Sin embargo, la profesional descartó que esa situación de pobreza extrema guarde relación directa con el alto índice de delincuencia que afecta al país, resaltando que muchos de los que delinquen no es precisamente para comer.
Responsabilizó del auge de la delincuencia al micrográfico de drogas en los barrios donde según dijo, abunda mayormente la venta de marihuana y crack, esta última por ser mucho más barata pese al alto grado de daño que provoca en las personas.
“Y en último grado la cocaína, pero una cocaína mala, porque la buena en los barrios la venden a personas que no son del barrio sino que van allí a abastecerse”, aseguró al ser entrevistada en el programa “El Bulevar con Pablo Mckinney” que se transmite por CDN2.
Tahira Vargas destacó que en la sociedad dominicana, especialmente en los sectores más pobres hay mucha solidaridad y apoyo con los vendedores de droga, debida a la ayuda que estos brindan a la comunidad.
Recordó que el ejemplo más claro lo representa el ex capitán Quirino Ernesto Paulino Castillo y el impacto que ha tenido en la población de Elías Piña su apresamiento y posterior deportación a Estados Unidos.
“Porque Quirino le estaba dando de comer a mucha gente, porque no solo tenía los negocios, no solo la producción agrícola y de madera, sino también que regalaba dinero, resolvía cuando la gente necesitaba para problemas de salud, de enfermedad, e incluso de reparación de viviendas, o sea, todo lo que tenía que ver con problemas que le tocarían al Estado”, indicó.