HIGÜEY.-Monseñor Gregorio Nicanor Peña Rodríguez, obispo de la Diócesis de la Altagracia, cree que el joven que trató ayer de quemar el cuadro de la virgen de La Altagracia en la basílica es “un fanático religioso”.El profanador fue identificado como José Antonio Telemín Guerrero, de 22 años, residente en la calle 7, sin número, del sector de Villa Progreso, de la ciudad de La Romana, quien está detenido en el cuartel policial.
El joven declaró que pertenece a la Iglesia Pentecostal Misionera y que había cometido el hecho porque “Dios se lo había ordenado”.
"También dicen que es un loco, pero yo no lo creo que sea tan loco, por qué no se lo ocurrió, por ejemplo, ir a la fortaleza del Ejército Nacional a hacer un desorden", dijo monseñor Peña Rodríguez.
Informó que en horas de la tarde de ayer, Telemín Guerrero entró al templo con una botella llena de gasolina con el supuesto fin de quemar la imagen de la Virgen de la Altagracia que se encuentra en el altar mayor de la basílica.
Agregó que agentes de Politur lo echaron fuera, pero en un descuido éste volvió y rompió varios ajuares que se encontraban en el altar, tales como jarrones, velas y flores.
"Yo creo que hay que tomar medidas ya que este no es solamente un santuario de Higüey, sino que es un santuario nacional", enfatizó el obispo.
Peña Rodríguez expresó que algunas personas opinan que es un fanático religioso, porque él decía que adoraba al Dios de Israel y que no adoraba imágenes.
"Tenemos que estar atentos. Si tenemos que montar una guardia de católicos para defender ese tesoro; este patrimonio que es parte de la dominicanidad, como es la devoción a la Virgen de la Altagracia", señaló.
El prelado católico dijo que su impresión es que se trata de una persecución a la Iglesia Católica, porque hace apenas dos semanas fueron a la Iglesia de San Miguel y allí hicieron un desorden y hace más o menos tres semanas vinieron a la basílica y el Cristo que se usa para la procesión lo agarraron y lo tenían no sé que iban a hacer con él".
Señaló que se hacen ataques "furibundos" diciendo que los católicos adoran imágenes, que no es así, y que parece que ello ha calado en algunos fanáticos religiosos que han querido hacerle daño a la Iglesia Católica.
Peña Rodríguez dijo que esto ha llegado a sembrar odio y rabia contra el templo y los símbolos religiosos de los católicos.
Pidió a quienes tienen la responsabilidad de custodiar la basílica que tengan mejor cuidado y que sean más diligentes. www.elnacional.com.do
