Uno de los condenados por narcotráfico en el llamado Caso Quirino habría acusado a funcionarios del gobierno y a oficiales militares y policiales en el juicio que se le hizo en Nueva York en el que recibió una pena negociada de 14 años de prisión.
Luis Eduardo Rodríguez Cordero habría informado, de acuerdo con los documentos del tribunal, que “hay muchas personas envueltas” tanto del gobierno como de las Fuerzas Armadas.
Los nombres de estos supuestos involucrados no están revelados en los documentos de la corte en Nueva York.
Desde hace semanas se ha estado rumorando en el país que las autoridades judiciales estadounidenses estarían solicitando a las autoridades dominicanos la extradición de los involucrados.
“Es bien conocido que en la República Dominicana los oficiales corruptos de las Fuerzas Armadas son forrados de dinero (por los narcotraficantes). Se les paga muy buen dinero. Son oficiales con millones de dólares,” habría alegado Linda George, la defensora de Cordero Rodríguez. “Esto ha sido parte de la corrupción sistémica de la República Dominicana.
Todos sabemos que es un hecho”. De acuerdo con documentos que fueron dados a conocer por el digital Diario Horizonte, la abogada Linda George, defensora de Rodríguez Cordero, su cliente invertía dinero en la operación de drogas al igual que los llamados Mellizos Ulloa, los hermanos David y Jean Paul. Como principal responsable de las operaciones, Rodríguez Cordero señaló al capitán del Ejército, Quirino Ernesto Paulino Castillo.
Rodríguez Cordero habría negociado con la corte al declararse culpable y aceptar la acusación en su contra, aun cuando su abogada alegó que había sido víctima de evidencias obtenidas ilegalmente por las autoridades dominicanas. En la audiencia Rodríguez Cordero, tras declararse culpable, pidió misericordia a la jueza Kimba Wood. “Yo pido el perdón a los ciudadanos de los Estados Unidos.
Los contrabandosEste es mi país que me dio una oportunidad. Pido el perdón de la honorable jueza, al gobierno, a mi familia. Le doy gracias a mi abogada, Linda George, quien ha trabajado duro a mi lado todo este tiempo,” habría dicho Rodríguez Cordero en la audiencia según los documentos obtenidos por Margarita Canahuate y publicados por el Diario Horizonte.
La abogada George dijo en el tribunal que Paulino Castillo era quien organizaba los contrabandos y las rutas para hacer llegar la droga a territorio estadounidense.
El fiscal John O’Donnell dijo en el tribunal que Luis Eduardo Rodríguez Cordero y su hermano Samuel había trabajado en el negocio de la droga por diez años. “Básicamente, ellos compraban drogas a sus suplidores en la República Dominicana.
Arreglaban la droga para que llegara a Puerto Rico y Nueva York, para venderla a los distribuidores regionales. Hay evidencias que Luis Eduardo Rodríguez Cordero trabajaba directamente con el suplidor para transportar grandes cargamentos de drogas desde hace diez años. Su hermano está fugitivo de la justicia.
Ellos cuatro trabajaban juntos. Cada uno obtuvo ganancias neta por 3.5 millones de dólares”, sostiene la acusación de O’Donnell.
NEGOCIACIONES
La abogada Linda George negó que haya evidencias de que su cliente estuviese envuelto en varios cargamentos de drogas y alegó que el único que debería estar a cargo de las transportaciones es el suplidor. Insistió que su cliente sólo invirtió dinero y recibía los cargamentos en Nueva York.
Las negociaciones previas entre la fiscalía de Nueva York y Rodríguez Cordero no fueron aceptadas del todo por la jueza Kimba Wood.