El director de Migración, mayor general José Aníbal Sanz Jiminián, dijo ayer que el gobierno dominicano continuará las repatriaciones de haitianos indocumentados que habitan en los pueblos fronterizos y señaló que viajará junto al jefe de la Policía a la frontera con Haití para reforzar las medidas preventivas y evitar nuevos hechos de violencia en la zona.
Los repatriados es como consecuencia de los hechos violentos ocurridos en Neyba, Guayubín y otras poblaciones, que dejaron un saldo de tres personas muertas y decenas de viviendas destruidas. Sólo se refirió a los 476 enviados a su país el pasado martes.
“Yo no le puedo decir cifras específicas, porque muchas veces de Santiago se mandan, de la parte Sur se mandan, de diferentes lugares y nos van llegando esporádicamente los informes”, dijo.
Expresó que ayer viajó a Guayubín, en la provincia Monte Cristi, el subdirector de Migración, Juan Isidro Pérez, quien “está tomando las medidas pertinentes en coordinación con las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, para evitar que sigan los enfrentamientos”.
“Mañana (hoy) salimos para Dajabón y el martes para Jimaní y vamos a estar visitando todos los puntos fronterizos. Incluso, el lunes se va a iniciar en la frontera un sistema biométrico, para llevar un conteo para las personas que entran en los puestos de chequeo”, señaló.
Agregó que una de las medidas principales que adoptará la jefatura de las Fuerzas Armadas es el patrullaje y la prevención. Aseguró que los organismos de inteligencia de las Fuerzas Armadas y de la Policía intensificaron su trabajo en la zona, donde los residentes, haitianos y dominicanos, temen ser agredidos, en medio de la ola de violencia que los afecta.
Afirmó que el 99% de los repatriados luego de los sangrientos enfrentamientos de Neyba y Guayubín son ilegales y advirtió a los sectores empresariales que contratan haitianos para trabajar en las zonas agrícolas, turísticas y de la construcción, que deben detener esa práctica, tras recordar que la Ley de Migración 285-04 establece que el 80% de los puestos de trabajo en el país deben ser para los dominicanos.
No obstante, consideró que es casi imposible controlar la entrada ilegal de haitianos al territorio nacional a través de lomas, montañas y montes, al tiempo que declaró que a las autoridades les resulta difícil vigilar en todas sus partes un trayecto fronterizo tan largo.
El funcionario precisó que las repatriaciones se produce en coordinación con el gobierno haitiano, a través de su embajador en el país, Fritz Cineas, y que los hatianos son recibidos por las autoridades de esa vecina nación.
“Lo primero que hicimos fue comunicarnos con el embajador haitiano. Nos hemos reunido en varias oportunidades y hemos llegado a un acuerdo, que cuando vayamos a deportar haitianos ilegales, hacemos un listado y se lo mandamos a la embajada haitiana, para que comuniquen a las autoridades de Haití que vayan a recibirlos a la frontera. Un acuerdo entre el embajador y la dirección de Migración”, precisó Sanz Jiminián.Indicó que la medida no afectará a los extranjeros que disponen de visa de turista, residencia dominicana o pasaporte.
Dijo que en las próximas horas se apresta a apresar a los cabecillas de una banda de traficantes que llenan las calles de la capital, Santiago y otras ciudades de niños haitianos pedigüeños, lo que afecta la imagen del país.
Es la segunda vez que el funcionario refiere el tema de los niños pedigueños que operan en las calles de las principales ciudades del país, sobre todo, en el Distrito Nacional, Santo Domingo y Santiago.
Incluso, otros funcionarios y residentes en las zonas de mayor incidencia se han quejado de que parte de esos niños ofenden alas personas y hasta causan daños