La Oficina para el Reordenamiento del Transporte (Opret) hará la presente semana otra prueba a la primera línea del Metro de Santo Domingo, pero no será hasta después de las elecciones del 16 de mayo cuando esa polémica obra entre en funcionamiento para el público en general, debido a que no están concluidas una serie de obras colaterales que garantizarían su funcionamiento perfecto.
Un ingeniero que labora en el viaducto, que se extiende desde el poblado de Villa Mella hasta La Feria, no especificó el día de la prueba, pero afirmó que a la misma fueron invitados funcionarios y empleados que laboran en la obra y sus familiares.
“El personal dominicano y extranjero que labora en la obra está agilizando el trabajo. Hay un gran movimiento aquí de toda la gente que está a cargo de la obra, pero faltan muchos detalles que es necesario atender antes de que el Metro opere como una ruta comercial”, expresó el profesional, quien pidió reservas de su nombre.
“Por el momento, la prioridad número uno de la Opret es es que el metro funcione perfectamente para el público. Después del 16 de mayo será la ruta comercial, porque faltan muchos detalles”, precisó.
El Gobierno había dicho que esa primera línea del Metro entraría en operación en este mes y en los últimos días han circulado versiones de que la obra sería usada para transportar hasta la Plaza de la Cultura a los estudiantes del interior del país que lleguen a la capital para participar en la Feria del Libro, partiendo desde la terminal del Centro Olímpico. Ambas versiones fueron desmentidas por el informante.
Pereiodistas hcieron un recorrido por la zona de construcción del Metro y se percató de que, ciertamente, existe gran movimiento de maquinarias y personal alrededor de la importante estructura, los cuales hacen perforaciones, rellenos de tierra, conexiones eléctricas y otras actividades.
En Villa Mella, en la intersección de las avenidas Hermanas Mirabal y Charles de Gaulle, el tránsito fue desviado porque siete enormes máquinas hacen perforaciones para facilitar la construcción de un túnel que permita la circulación de vehículos en ese punto.
“Estamos haciendo el soporte para el soporte de la tierra del relleno, que es muy blandita, afirmó uno de los operarios”, quien afirmó que se prevé que el túnel estará terminado en los próximos dos meses.
En las proximidades del puente Presidente Peynado, en los terrenos donde operaba la denominada Cementera, se construye un trébol de cuatro rotondas, para facilitar el movimiento de los vehículos que llegarán a ese punto para desmontar pasajeros que posteriormente abordarán el Metro.
En la Máximo Gómez, a la altura de la avenida Nicolás de Ovando, hasta las proximidades de la Cementera, se elevanta un elevado que evitaría los taponamientos en la intersección formada por ambas vías.
También hay mucha actividad en las terminales del Metro, que estarán dotadas de escaleras eléctricas y de concreto.
EL ACCESOGran hermetismo rodea la contrucción de la primera línea del Metro de Santo Domingo.
Ninguno de los funcionarios de la Opret ofrece informaciones sobre los avances de ese viaducto, mientras han prohibido a obreros y técnicos ofrecer detalles a los periodistas sobre el tema, que mantiene en expectativa a la población de la capital y del interior del país.
Las terminales y otras áreas de la costosa obra están militarizadas y no se permite el acceso a las mismas de personas ajenas a sus instalaciones.
Ingentes esfuerzos por comunicarse con la encargada de relaciones públicas de la Opret, periodista Yanet Ventura, quien en ningún momento respondió su teléfono celular.
Tampoco han respondido a los llamados de este diario los ingenieros Diandino Peña y Leonel Carrasco, principales voceros de la Opret.