El programa acordado por las autoridades dominicanas y el FMI incluye el diseño de una política fiscal contra cíclica y el mantenimiento de las condiciones monetarias actuales con el propósito de contrarrestar los efectos de la crisis financiera internacional.
La entrega se llevó a cabo en el marco de las reuniones anuales del FMI y del Banco Mundial por el gobernador del Banco Central, Héctor Valdez Albizu, el secretario de Estado de Hacienda, Vicente Bengoa y el secretario de Estado de Economía, Planificación y Desarrollo, Temístocles Montás.
En esta reunión también participaron el Director Ejecutivo de la Silla a la que pertenece el país, Paolo Nogueira Batista, así como otros altos ejecutivos de ese organismo internacional y del país. En lo que va del año, las autoridades monetarias han adoptado medidas para reducir las tasas de interés con el objetivo de propiciar una expansión del crédito en la economía.
No obstante, la capacidad de la ejecución de una política fiscal expansiva para contrarrestar el ciclo económico se ha visto limitada por la disminución en las recaudaciones fiscales y la drástica reducción del financiamiento internacional y doméstico como resultado, en gran medida, de la crisis financiera internacional, dice una nota de la Dirección de Prensa y Públicida de la Presidencia.
En el ámbito tributario, se propone el diseño de un conjunto de estrategias orientadas a fortalecer la administración tributaria, además del manejo integral de las exenciones fiscales.
En el programa han sido incorporados aspectos estructurales para fortalecer la gobernabilidad y lograr un mejor desempeño del sector eléctrico, además incluyendo elementos de política social que permitan al Estado auxiliar a los más necesitados. Este nuevo acuerdo Stand-By con el FMI tendría una duración de dos años.
En el marco macroeconómico, a mediano plazo contenido se contempla restaurar el ritmo del crecimiento del PIB real, reducir la inflación, disminuir gradualmente el déficit de cuenta corriente de la balanza de pagos y un aumento gradual del superávit primario del sector público consolidado.