
Bonilla manifestó que se ha cometido “un crimen a la patria”, con la modificación de ese artículo aseguró que aunque explícitamente deja el acceso, está condicionando y limitando su uso.
“En 15 años en el Congreso nunca me había sentido tan mal, frustrada e impotente como cuando se aprobó el artículo 13 que antes era el 78 ó 79, que limita el libre acceso de los y las ciudadanos a sus playas como patrimonio público”, precisó la legisladora durante una entrevista en el programa de televisión El Día.
Dijo si se sigue el ritmo que lleva la Reforma a la Constitución, lo que resulte será de Miguel Vargas Maldonado y de Leonel Fernández y explicó en este sentido que el acceso libre a las playas es un derecho de cada ciudadano y que la modificación que se hizo “no es inocente”.
“Hay intereses poderosos detrás. Es un complejo de Guacanagarix que queremos tener de entregar lo propio. Podría ser susceptible a propiedad privada. Es nuestro deber hacer las cosas bien”, señaló la asambleísta.
Isabel Bonilla indicó que líderes de los partidos y empresarios hoteleros estaban llamando a los legisladores para que si no querían votar se ausentaran a la asamblea. Señaló que cuando se suspende una asamblea es para ganar tiempo y que en este caso resulta extraño que de 54 que habían votado la primera vez en contra de la modificación, sólo quedaron 25 de los 54. “Convencieron a los demás con chantajes”.
En este sentido, aseguró que la actual Reforma a la Constitución se está dando mediante una coyuntura electoral, debido a que algunos legisladores quieren repetir y otros pasar a otros cargos, por lo que deben mantener sus relaciones como candidatos.
“En política tener cerebro propio y ser auténtico se paga un precio. Los que votaron a favor darán su cuenta, yo daré la mía”, precisó.
Dijo que prefirió no inscribir su candidatura para no estar comprometida y esperar que sea el PLD que diga a quienes reservaron sus puestos.