Casi 600,000 envejecientes viven en condiciones de pobreza, desprotección social y sanitaria en la República Dominicana, pues el Estado los dejó fuera cuando inició la aplicación del Seguro Familiar de Salud en el régimen contributivo el año pasado y no ha implementado la pensión asistencial para mayores de 65 años.
Sin embargo, de esos casi 600 mil envejecientes, la situación más crítica la tienen unos 250,000 que viven en condiciones de desamparo, sin servicios de salud y sin medicamentos.
La denuncia la hizo ayer el doctor Fulgencio Severino, experto en seguridad social, quien consideró dramáticas las condiciones de pobreza y exclusión en que vive ese grupo poblacional.
Actualmente, el Gobierno sólo ha pensionado a 129,000 personas, lo que incluye a los del Instituto Dominicano de Seguros Sociales (IDSS), las Fuerzas Armadas, la Policía Nacional y los maestros.
Los pensionados civiles del Estado son unos 17,000, los pensionados del IDSS son unos 43,000 y los de Educación son 13,000 entre maestros y administrativos.
Otros pensionados son los del Consejo Estatal del Azúcar (CEA) y la Corporación Dominicana de Empresas Estatales (CORDE)
El registro de datos de que disponen las autoridades habla de 585,000 envejecientes a los que se les debería otorgar pensión y protección sanitaria.
Esa es la población que tiene más de 65 años, pero sólo se sabe de pensión a 129,000 personas, que están excluidas de servicios de salud. Sólo los del IDSS reciben lo que le puede dar esa red sanitaria.
El nivel de protección que otorga la Ley 87-01 en cuatro años desde que comenzó su implementación, debió aplicarse la pensión asistencial para ese grupo. Esa debió comenzar del 2001 al 2005.
Los que tenían pensión asistencial debieron entrar al régimen subsidiado y los pensionados.
Se trata de una población con muchos problemas de salud, pues desde los 65 años comienzan a registrarse episodios de hipertensión o diabetes.
La pensión asistencial de acuerdo a la Ley 87-01 establece que un grupo de personas entre los que están los envejecientes debe recibir el 60% del salario mínimo del Estado.
“Estamos hablando de unos RD$2,000”, dijo el doctor Severino, quien lamenta la situación de ese grupo..
1.- “Si se toma en cuenta que el 42% de la población vive en condiciones de pobreza, hay que concluir que es muy dramática la situación en que vive un grupo de envejecientes que depende de sus hijos pobres para la sobrevivencia”, asegura el experto.
2- En cuatro años debió implementarse la pensión y la salud para ese grupo.
3- Se estima que los casi 600,000 envejecientes, 250,000 viven en condiciones críticas y necesitan de una pensión asistencial, expresó el galeno.
4-Para la ley 87-01 se establece pensiones para los régimenes contributivo, contributivo subsidiado y subsidiado. La pensión asistencial es un fenómeno que ha dado resultados positivos en América Latina.
Los ancianos y envejecientes, trabajadores o no, constituyen uno de los grupos poblacionales que viven en mayor pobreza.
En la actualidad este grupo no tiene protección asistencial y muchos deben pedir cuando cno tienen medicamentos y alimentos. La ley los ha excluido.