El miembro titular de la Junta Central Electoral (JCE), Eddy Olivares, propuso ayer la congelación de los programas sociales que ejecuta el Gobierno, de la nómina pública y nuevos puestos de trabajo, hasta que concluya el proceso electoral.
Asimismo, sugirió que la Cámara Administrativa de la JCE haga un monitoreo de toda la publicidad estatal a partir de la fecha de la Proclama Electoral, y que se obligue al Estado a reembolsar los recursos de todas aquellas que se compruebe fueron pagadas con recursos públicos.
Agregó que también las nóminas de los ayuntamientos deben congelarse y entregarse a la JCE a partir de un corte inmediato que se haga de las mismas.
“Mañana someteremos una instancia al pleno de la JCE para que solicite al Gobierno que congele todos los planes sociales y le entregue a la Junta la lista con los nombres de las personas beneficiadas, de manera que ninguno de esos planes, que sabemos que cumplen una función social, se sigan utilizando en medio de las elecciones para captar votos en una competencia desigual entre los partidos”, dijo Olivares.
Señaló que el propio presidente de la República tiene que contribuir a “despejar” cualquier duda sobre el proceso electoral, y esa sería una muy buena manera de hacerlo.
El miembros titular de la Cámara Contenciosa habló en esos términos al ser entrevistado en torno a las declaraciones del cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, quien dijo este domingo que es responsabilidad de la JCE detener el uso de los recursos en la campaña, al tiempo que puso en duda que el tribunal electoral quiera asumir esa responsabilidad.
Olivares, sin embargo, dijo estar “plenamente” seguro que la Junta Central Electoral tomará las decisiones que amerita el caso, señalando que el compromiso fundamentar del organismo es garantizar un proceso electoral diáfano y transparente.
“Y para eso, es necesario que el proceso esté rodeado de las mayores garantías de igualdad entre los adversarios políticos, lo cual es una condición en un proceso verdaderamente democrático”, declaró.