NUEVA YORK (EFE).- El precio del barril de crudo de Texas bajó hoy un 3,1% y finalizó la sesión a 78,63 dólares en Nueva York, mientras persiste la inquietud por la evolución de la demanda y se esperan más datos de reservas almacenadas en Estados Unidos. Al concluir la sesión en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de Petróleo Intermedio de Texas (WTI) para entrega en noviembre reducían en 2,56 dólares el precio anterior y cerraban, por segunda vez este año, a menos de 80 dólares.
Los contratos de gasolina y de gasóleo también registraron descensos en sus valores, al contrario de lo que había sucedido en la jornada anterior.
La gasolina para entrega en noviembre finalizó 3 centavos más barata que el día anterior, a 1,8848 dólares el galón (3,78 litros).
El gasóleo para ese mismo mes se depreció casi 9 centavos, para quedar a 2,2597 dólares/galón.
Sin embargo, el gas natural para noviembre se encareció 4 centavos, hasta los 6,72 dólares por mil pies cúbicos.
El precio del petróleo WTI siguió hoy el camino que marcaba la Bolsa neoyorquina, como ha ocurrido este mes, y la moderada tendencia bajista que mostró durante gran parte de la jornada se intensificó a medida que se aproximaba el cierre.
Las medidas que han puesto en marcha diversos Gobiernos, incluido el de EE.UU., y otros tantos bancos centrales para recapitalizar bancos y facilitar el flujo de crédito, no parece que hayan disipado de momentos los temores al efecto que la crisis financiera puede tener en el conjunto de la economía.
Unas perspectivas más sombrías acerca del crecimiento económico a nivel mundial tienden a suscitar incertidumbre en torno a la evolución que seguirá la demanda de crudo y de combustibles en los países desarrollados y en otros en vías de desarrollo.
Los precios del crudo y de otras materias primas registraron espectaculares avances durante la primera mitad de este año y el barril de crudo WTI llegó a negociarse a 147,27 dólares durante la sesión del 11 de julio pasado, entre signos de un fuerte crecimiento económico a nivel mundial.
Sin embargo, el escenario ha cambiado en los últimos meses y se teme que la aguda crisis financiera en EE.UU. y las repercusiones que tiene en otros países aceleren una recesión generalizada, según los expertos.
La Agencia Internacional de Energía (AIE) y el Departamento de Energía han rebajado en los últimos meses sus previsiones sobre el crecimiento de la demanda este año y el próximo, lo que presiona a la baja a los precios del crudo y de los combustibles.
El galón de gasolina se vende ahora al público en EE.UU. a un precio medio de 3,16 dólares, 63 centavos o un 16,7% menos que hace un mes, según datos que difunde a diario la asociación automovilista AAA, la mayor en este país.
No obstante, ese precio es aún 41 centavos o un 13% más alto que hace un año.
Los operadores neoyorquinos conocerán el próximo jueves, un día más tarde de lo habitual, los datos más recientes del Departamento de Energía relativos a existencias de crudo, gasolina y destilados, incluido el gasóleo, y se prevé que reflejaran incrementos en todos los casos.