NUEVA YORK (EFE).- El precio del barril de crudo de Texas se negociaba hoy por debajo de los 75 dólares, tras perder cerca de un 5%, y registraba así su nivel más bajo de los últimos trece meses. En las primeras horas de la sesión regular de la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros del crudo de Texas con vencimiento en noviembre llegaron a negociarse a 74,57 dólares por barril, lo que supone un descenso del 5,1% respecto al cierre del martes.
Este tipo de crudo no cotizaba por debajo de los 75 dólares por barril desde la primera semana de septiembre de 2007 y no cerraba a un precio inferior a ese desde el 31 de agosto de ese año.
Esta caída, similar a la registrada en Londres por el barril de Brent, tenía lugar después de que la Organización de Países Productores de Petróleo (OPEP) rebajara hoy en más de un tercio su previsión sobre el crecimiento de la demanda de petróleo en 2008, debido al previsible descenso del consumo en los países más desarrollados.
Así, mientras que el mes pasado la OPEP cifró en el 1,02% el aumento de la demanda prevista de crudo para el conjunto del año, en su último informe, difundido este miércoles, lo sitúa en el 0,6%.
Ello supondría que el mundo consumirá este año solo 550.000 barriles más que en 2007 (una media de 86,45 millones de barriles diarios), 330.000 por debajo de lo que se había calculado en septiembre.
Desde que el crudo de Texas alcanzó su máximo histórico el pasado 11 de julio, al llegar a cambiarse a 147,27 dólares, su precio se ha reducido a prácticamente la mitad, de forma que en cuatro meses ha descendido un 49,3%.
El ajuste de los cálculos de la OPEP está en la línea con los acometidos recientemente por la Agencia Internacional de Energía (AIE) y el Departamento de Energía de Estados Unidos, que han rebajado en los últimos meses sus previsiones sobre el crecimiento de la demanda este año y el próximo, lo que suele presionar a la baja a los precios del crudo y de los combustibles.
Además, la difusión de los datos sobre las ventas minoristas en Estados Unidos durante septiembre dio cuenta de nuevo de que la ralentización de la principal economía del mundo persiste.
El Departamento de Comercio de Estados Unidos informó que esas ventas cayeron el 1,2% en septiembre respecto al mes anterior, lo que supone el tercer descenso mensual consecutivo, hasta su nivel más bajo de los últimos tres años.
Al igual que los contratos de crudo, los de gasolina para entrega en noviembre también caían hacia la media sesión y se cambiaban a 1,80 dólares el galón (3,78 litros), frente a los 1,88 dólares a los que cerraron el martes.
El gasóleo para ese mismo mes se depreciaba igualmente, para negociarse a 2,21 dólares por galón, frente a los casi 2,26 dólares de la sesión anterior.
Incluso el gas natural para noviembre se abarataba ocho centavos, hasta 6,64 dólares por cada mil pies cúbicos.
Los operadores neoyorquinos conocerán mañana, un día más tarde de lo habitual, los datos recientes del Departamento de Energía sobre las existencias de crudo, gasolina y destilados, incluido el gasóleo, y se prevé que reflejarán incrementos en todos los casos, lo que también podría presionar a la baja los precios.