El presidente en funciones del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP), Lisandro Macarrulla expresó hoy preocupación por la crisis financiera de los Estados Unidos y abogó porque en la República Dominicana se tomen correctivos internos ante esa situación, a fin de disminuir el impacto negativo.
Manifestó que si la crisis financiera de los Estados Unidos continúa podría reflejarse en el número de desempleados en el país, y puso como ejemplo las empresas de Zona Franca.
Dijo que le preocupa la situación que afecta a Estados Unidos y que los empresarios dominicanos están amenazados, aunque no es tan radical en sostener que muchos quiebren.
Destacó que hay muchos elementos que gravitan negativamente que están fuera del control dominicano entre los que citó el precio del petróleo y el precio internacional de los alimentos.
Recordó que los dominicanos tienen el 80% del intercambio comercial con los Estados Unidos y que la mayor cantidad de remesa vienen al país de esta nación y todo lo que ocurre allá repercute en la República Dominicana.
El presidente del CONEP habló con los periodistas luego de reunirse con el vicepresidente Rafael Alburquerque y una comisión de los obreros del Puerto de Santo Domingo, quienes exigen que el gobierno incluya en el presupuesto el pago de RD$270 millones de prestaciones que adeuda a ese sector.
El dirigente empresarial dijo que cuando a los Estados Unidos le va bien, a los dominicanos también, pero cuando le va mal eso también repercute en la República Dominicana.
En relación con la firma de un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) dijo que el CONEP no tiene una posición definida en torno al tema.
Sin embargo, dijo que el CONEP buscará consensuar la posición, pero reiteró que no tienen posición definida para apoyar o rechazar un nuevo acuerdo con el organismo internacional.