El 86.6 por ciento de alrededor de un millón 233 mil personas beneficiarias del Régimen Subsidiado de la Seguridad Social, la población dominicana más pobre, está “muy satisfecha y satisfecha” con la disponibilidad, cobertura, eficiencia, calidad, transparencia, credibilidad y profesionalidad de los servicios que le brinda el Seguro Nacional de Salud (SeNaSa).
Así lo revela el estudio sobre la “Satisfacción de los Afiliados a SeNaSa del Régimen Subsidiado”, dado a conocer hoy por el licenciado Rafael Acevedo, presidente de la firma encuestadora Gallup Dominicana, durante un acto encabezado por el Vicepresidente Rafael Alburquerque y por la doctora Altagracia Guzmán Marcelino, directora ejecutiva de la Administradora de Riesgos de Salud (ARS) estatal.
A la actividad asistieron el licenciado Max Puig, secretario de Trabajo y presidente del Consejo Nacional de la Seguridad Social; el doctor Bautista Rojas Gómez, secretario de Salud Pública (SESPAS); los directores regionales de dicho organismo estatal y los gerentes regionales y del nivel central de SeNaSa, entre otras personalidades.
De acuerdo con la encuesta Gallup-SeNaSa 2009, los beneficiarios pobres saben que para afiliarse a la ARS estatal no hace falta la recomendación de un político o persona influyente: tal afirmación la hizo este año el 87.6 por ciento de los entrevistados, un porcentaje más alto que el 80.7 de 2007. Asimismo, la frase “los servicios médicos son gratis, pero las medicinas no” fue rechazada por el 75.2 por ciento de los encuestados este año, cifra superior al 73 por ciento de hace dos años.
Gallup Dominicana entrevistó a una muestra representativa de dos mil afiliados subsidiados, cuya cobertura sanitaria es asumida en su totalidad por el Estado, en las nueve regiones de salud en las que está dividido el país.
“Se procuró determinar la imagen y la percepción de dichos beneficiarios sobre la calidad, cobertura y eficiencia de los servicios sanitarios garantizados por SeNaSa y ofertados a través de la Red Pública de Servicios de Salud (clínicas rurales, hospitales municipales, provinciales, regionales y nacionales de SESPAS)”, explicó Acevedo.
SeNaSa tiene contratados, igualmente, los servicios ofrecidos por la Red Mixta de Salud, compuesta por los Institutos de Cardiología, Dermatología, Oncología y CEDIMAT, entre otros centros de medicina especializada.
El 84.4 por ciento de los encuestados dijo estar “muy satisfecho y satisfecho” con la disponibilidad de los servicios de SeNaSa; el 87.1, con el alcance y cobertura de la atención sanitaria y los tratamientos; el 88.6, con la eficiencia de los servicios; el 83.5, con la calidad de los servicios; el 87.5, con la transparencia de los procedimientos; el 86.2, con la confianza y credibilidad de la ARS estatal; el 82.9, con la profesionalidad y honestidad de los médicos y administradores; y el 84.8 por ciento, con la disponibilidad y suficiencia de los centros de salud.
Uno de los hallazgos más importantes del estudio fue que la población afiliada bajo el Régimen Subsidiado que ha utilizado los servicios de SeNaSa se duplicó: de un 20.6 por ciento en 2007 a un 40.4 por ciento en 2009. Las regiones que más hicieron uso de dicha cobertura sanitaria fueron el Sur, con un 48.3 por ciento; y el Cibao, con un 42.5 por ciento.
El 92.8 por ciento de los entrevistados este año reconoció que hubiera gastado mucho dinero de su propio bolsillo, de no haber contado con la cobertura de SeNaSa; mientras que en 2007 hizo una afirmación similar el 85.2 por ciento, una cantidad significativamente menor.
Beneficiarios conocen sus derechos
Otro valioso descubrimiento fue que la conciencia de los afiliados sobre el derecho a la salud de la población dominicana, no importa su condición laboral o social, aumentó: en 2007, el 69.4 por ciento consideró falso el planteamiento de que “no tienen derecho al Seguro Nacional de Salud las personas que no sean empleadas de una empresa privada o del Gobierno; mientras que, este año, lo hizo el 76.4 por ciento. Actualmente, sólo el 19 por ciento de los afiliados subsidiados desconoce que no es preciso ser empleado para disfrutar de la cobertura de SeNaSa.
“Toda persona, rica o pobre, debe tener asegurado el acceso a la salud”, fue una frase aceptada por el 91.2 por ciento de los entrevistados, un margen mucho más amplio que el 82.4 por ciento de 2007. Igualmente, se redujo el porcentaje de beneficiarios que consideran que la ARS estatal sólo brinda servicios a las personas que están enfermas, de un 53.9 por ciento, en 2007; a un 41 por ciento, en 2009.
Asimismo, los beneficiarios del Régimen Subsidiado rechazaron mayoritariamente este año (79.6 por ciento) la falacia de que “el SeNaSa sólo incluye consultas, no internamiento ni cirugías”. En 2007, sólo el 62.9 por ciento se mostró en contra de dicha frase engañosa.
Por otra parte, el 97.5 por ciento de los afiliados estableció que se requiere de la Cédula Personal de Indentidad para afiliarse a la ARS estatal; y un 83 por ciento indicó que se precisa de las actas de nacimientos para empadronar a hijos e hijas. Es interesante hacer notar que sólo el 5.3 por ciento de los encuestados consideró que para todo lo anterior hace falta “el carné del partido”.
Sobre la incidencia de enfermedades en los beneficiarios del Régimen Subsidiado, las más comunes fueron la hipertensión arterial, los males pulmonares, los problemas en la circulación sanguínea, las irregularidades estomacales o intestinales y las dolencias en huesos y músculos.
Así lo revela el estudio sobre la “Satisfacción de los Afiliados a SeNaSa del Régimen Subsidiado”, dado a conocer hoy por el licenciado Rafael Acevedo, presidente de la firma encuestadora Gallup Dominicana, durante un acto encabezado por el Vicepresidente Rafael Alburquerque y por la doctora Altagracia Guzmán Marcelino, directora ejecutiva de la Administradora de Riesgos de Salud (ARS) estatal.
A la actividad asistieron el licenciado Max Puig, secretario de Trabajo y presidente del Consejo Nacional de la Seguridad Social; el doctor Bautista Rojas Gómez, secretario de Salud Pública (SESPAS); los directores regionales de dicho organismo estatal y los gerentes regionales y del nivel central de SeNaSa, entre otras personalidades.
De acuerdo con la encuesta Gallup-SeNaSa 2009, los beneficiarios pobres saben que para afiliarse a la ARS estatal no hace falta la recomendación de un político o persona influyente: tal afirmación la hizo este año el 87.6 por ciento de los entrevistados, un porcentaje más alto que el 80.7 de 2007. Asimismo, la frase “los servicios médicos son gratis, pero las medicinas no” fue rechazada por el 75.2 por ciento de los encuestados este año, cifra superior al 73 por ciento de hace dos años.
Gallup Dominicana entrevistó a una muestra representativa de dos mil afiliados subsidiados, cuya cobertura sanitaria es asumida en su totalidad por el Estado, en las nueve regiones de salud en las que está dividido el país.
“Se procuró determinar la imagen y la percepción de dichos beneficiarios sobre la calidad, cobertura y eficiencia de los servicios sanitarios garantizados por SeNaSa y ofertados a través de la Red Pública de Servicios de Salud (clínicas rurales, hospitales municipales, provinciales, regionales y nacionales de SESPAS)”, explicó Acevedo.
SeNaSa tiene contratados, igualmente, los servicios ofrecidos por la Red Mixta de Salud, compuesta por los Institutos de Cardiología, Dermatología, Oncología y CEDIMAT, entre otros centros de medicina especializada.
El 84.4 por ciento de los encuestados dijo estar “muy satisfecho y satisfecho” con la disponibilidad de los servicios de SeNaSa; el 87.1, con el alcance y cobertura de la atención sanitaria y los tratamientos; el 88.6, con la eficiencia de los servicios; el 83.5, con la calidad de los servicios; el 87.5, con la transparencia de los procedimientos; el 86.2, con la confianza y credibilidad de la ARS estatal; el 82.9, con la profesionalidad y honestidad de los médicos y administradores; y el 84.8 por ciento, con la disponibilidad y suficiencia de los centros de salud.
Uno de los hallazgos más importantes del estudio fue que la población afiliada bajo el Régimen Subsidiado que ha utilizado los servicios de SeNaSa se duplicó: de un 20.6 por ciento en 2007 a un 40.4 por ciento en 2009. Las regiones que más hicieron uso de dicha cobertura sanitaria fueron el Sur, con un 48.3 por ciento; y el Cibao, con un 42.5 por ciento.
El 92.8 por ciento de los entrevistados este año reconoció que hubiera gastado mucho dinero de su propio bolsillo, de no haber contado con la cobertura de SeNaSa; mientras que en 2007 hizo una afirmación similar el 85.2 por ciento, una cantidad significativamente menor.
Beneficiarios conocen sus derechos
Otro valioso descubrimiento fue que la conciencia de los afiliados sobre el derecho a la salud de la población dominicana, no importa su condición laboral o social, aumentó: en 2007, el 69.4 por ciento consideró falso el planteamiento de que “no tienen derecho al Seguro Nacional de Salud las personas que no sean empleadas de una empresa privada o del Gobierno; mientras que, este año, lo hizo el 76.4 por ciento. Actualmente, sólo el 19 por ciento de los afiliados subsidiados desconoce que no es preciso ser empleado para disfrutar de la cobertura de SeNaSa.
“Toda persona, rica o pobre, debe tener asegurado el acceso a la salud”, fue una frase aceptada por el 91.2 por ciento de los entrevistados, un margen mucho más amplio que el 82.4 por ciento de 2007. Igualmente, se redujo el porcentaje de beneficiarios que consideran que la ARS estatal sólo brinda servicios a las personas que están enfermas, de un 53.9 por ciento, en 2007; a un 41 por ciento, en 2009.
Asimismo, los beneficiarios del Régimen Subsidiado rechazaron mayoritariamente este año (79.6 por ciento) la falacia de que “el SeNaSa sólo incluye consultas, no internamiento ni cirugías”. En 2007, sólo el 62.9 por ciento se mostró en contra de dicha frase engañosa.
Por otra parte, el 97.5 por ciento de los afiliados estableció que se requiere de la Cédula Personal de Indentidad para afiliarse a la ARS estatal; y un 83 por ciento indicó que se precisa de las actas de nacimientos para empadronar a hijos e hijas. Es interesante hacer notar que sólo el 5.3 por ciento de los encuestados consideró que para todo lo anterior hace falta “el carné del partido”.
Sobre la incidencia de enfermedades en los beneficiarios del Régimen Subsidiado, las más comunes fueron la hipertensión arterial, los males pulmonares, los problemas en la circulación sanguínea, las irregularidades estomacales o intestinales y las dolencias en huesos y músculos.