El Gobierno, a través de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) redoblará sus esfuerzos con el propósito de llevar a feliz término el proceso de adquisición de dos plantas generadoras a carbón, de 600 megavatios cada una, y con cuyo proyecto se ampliará la capacidad de rendimiento del Sistema Energético Nacional Interconectado (SENI).En una nota informativa, la CDEEE destaca que la adquisición de estas dos nuevas plantas de electricidad fue prevista en el Plan Integral de Desarrollo del Sector Eléctrico, diseñado entre el 2004 y el 2005, y donde se consignan un conjunto de acciones dirigidas a garantizar la estabilidad del servicio eléctrico en el país.
“Como empresa pública sabemos perfectamente que no puede haber un desarrollo sostenido del sector productivo nacional sin contar con una línea de acción destinada en lo fundamental a dar estabilidad al sector eléctrico, razón en la que inscribimos también la necesidad de compartir esta responsabilidad con el sector privado, como fuerza motriz de importancia en el empuje y concreción definitiva de estos proyectos de mejoría en la calidad del servicio eléctrico”, apuntó la CDEEE.
Dice que en ese orden de ideas deben también situarse los esfuerzos desplegados por el señor Presidente de la República, doctor Leonel Fernández, quien durante su reciente viaje al exterior formalizó contactos con los Emiratos Árabes Unidos, en la intención de entablar vías para el financiamiento e implementación de importantes proyectos energéticos.
En cuanto a la instalación de las dos nuevas plantas de generación a carbón mineral, la información destaca que con ello no sólo se reducen en forma significativa los niveles de costos por concepto de kilovatios/hora, sino que también se concede una mayor consistencia al parque de generación nacional de energía.
“Hablamos de 1,200 nuevos megavatios llamados a ser insertados en el SENI, con reforzamiento específico para las líneas de servicio de las zonas Sur y Norte del país”, agrega la corporación eléctrica estatal.
En cuanto al retraso de estos proyectos, esbozados de manera abierta por las autoridades estatales y con posibilidad de compartir la iniciativa con el sector privado, la CDEEE admite que los indicadores de recesión económica internacional influyeron en su dinámica e implementación, pero que “la propia realidad nos empuja a redoblar los esfuerzos hasta llevar a feliz término la negociación”.
Añade que el proyecto de instalación de las dos nuevas plantas generadoras fue, incluso, manejado bajo una licitación pública internacional, pero que debido al reflujo financiero marcado en el plano local por la recesión económica internacional, la operación no ha podido ser cerrada.
En el marco del proceso de optimización del sector eléctrico en la parte de generación, el Gobierno inscribe también, a través de la CDEEE, la conversión a gas natural de la central de San Pedro de Macorís, (antigua Cogentrix) con una generación unificada de 300 megavatios, y con la que habrá de reportarse una disminución de costo para el Estado entre los 10 y 12 millones de dólar
